Investigación se escribe en femenino: las mujeres del IDIBELL y su carrera

  • El pasado 11 de febrero, Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, el IDIBELL celebró el quinto sLHam de científicas.
  • Ocho científicas de la institución explicaron su carrera, retos y motivaciones en un monólogo de cinco minutos.
  • El techo de cristal, la conciliación familiar y los estereotipos de género son barreras que han tenido que ir superando pero que no les han impedido convertirse en las científicas de referencia que son hoy.
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Para poner de relieve el papel decisivo de las mujeres en nuestro sistema de investigación, y también para acercar a la sociedad su labor y sus reivindicaciones, el IDIBELL organiza cada año el sLHam de científicas, una exitosa iniciativa que este año va a llegar a su quinta edición.

Este año el sLHam tuvo lugar el 11 de febrero, Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia. Este día fue proclamado en 2015 por la Asamblea General de Naciones Unidas para conseguir la igualdad de género a través de la participación plena y equitativa de la mujer en la ciencia.

Con este acto lúdico-festivo, el IDIBELL da voz a las científicas de la institución para dar a conocer los factores que afectan a su carrera, visibilizar su trabajo y crear nuevos referentes. Este año las sLHameres fueron Avelina Tortosa, Marisa Mena, Mercè Martí, Isabel Fabregat, Susana Jiménez, Meritxell Rovira, Carmen Ardanuy y Mireya Plass, que en una charla divulgativa de cinco minutos explicaron la carrera en el mundo científico, los retos que han ido superando y las motivaciones que les han ayudado a hacerlo.

 

Cómo se convirtieron en científicas

 

Muchas sLHameras explicaron que su pasión por la ciencia se les despertó desde pequeñas. «Yo de pequeña quería ser médico, no de los médicos que curan sino de los que hacen medicamentos«, explicaba Marisa Mena, investigadora principal del IDIBELL. En otras ocasiones la belleza de la ciencia se abría camino por sí misma: “Yo de pequeña aluciné viendo como de una semilla, de una judía, podía salir una planta. -comentaba Mercè Martí, jefa de los servicios científico-técnicos del IDIBELL- ¿Qué magia era esa?”.

 

«Yo de pequeña quería ser médico, no de los médicos que curan sino de los que hacen medicamentos«, Marisa Mena.

 

 

Una vez en el mundo de la ciencia, ésta no deja de sorprenderte. Meritxell Rovira, jefa de grupo del IDIBELL, explicaba que las científicas y los científicos son estudiantes eternos, nunca dejan de aprender. «Caminante no hay camino, los y las científicas hacemos camino al andar«, citaba Isabel Fabregat, también jefa de grupo del IDIBELL. Y es que los y las científicas trabajan sobre terreno inexplorado. Son los resultados de sus experimentos quienes les marcan el camino a seguir.

 

«Caminante no hay camino, los y las científicas hacemos camino al andar«, Isabel Fabregat.

 

 

 

Mireya Plass, jefa de grupo del IDIBELL explicaba que en ocasiones la ciencia te lleva por caminos que nunca hubieras pensado. Por ejemplo, ella se presentaba como la bioinformática que no quería ser bioinformática (y ahora le encanta). O también, Mireya hablaba de cómo la mayoría de las veces la carrera científica no sigue exactamente los pasos pautados, pero que cada uno, con sus circunstancias, acaba llegando a su destino.

 

«A veces la ciencia te lleva por caminos que nunca hubieras pensado», Mireya Plass.

 

 

 

Avelina Tortosa, investigadora principal del IDIBELL, aconsejaba: “En los momentos decisivos de vuestra vida, parad, pensad, poned en una balanza y decidid”.

 

En los momentos decisivos de vuestra vida, parad, pensad, poned en una balanza y decidid”, Avelina Tortosa.

 

 

 

Rompiendo el techo de cristal

 

En el mundo de la ciencia y la investigación existe el llamado efecto tijeras, por el que en las etapas iniciales de la carrera científica el porcentaje de mujeres es más elevado que el de hombres, mientras que a medida que vamos avanzando a posiciones de poder este porcentaje se invierte, siendo más hombres que mujeres en las posiciones de responsabilidad (datos cerca, datos generalitat).

Durante el sLHam, Susana Jiménez, jefa de grupo del IDIBELL, enseñó una fotografía del edificio central de la Universidad de Barcelona, ​​de la pared en la que cuelgan los retratos de todos los rectores de la universidad hasta ahora. «Todos hombres«, comentó Susana, «pero seguro que pronto veremos a una mujer«, añadió también.

 

«Seguro que pronto veremos una mujer», Susana Jiménez.

 

 

 

En el IDIBELL también existe el efecto tijera, según los últimos datos, el porcentaje de investigadoras predoctorales es del 63%, en cambio, el de investigadoras principales es del 54%, y, el de mujeres jefas de grupo, del 37% . Y como institución, tenemos la obligación de trabajar para “cerrar” las tijeras. En este sentido, aunque todavía estamos lejos de la igualdad, en los últimos años el porcentaje de investigadoras principales y jefas de grupo sólo ha hecho que crecer, y el compromiso del IDIBELL es que siga siendo así hasta alcanzar la igualdad real, tal y como apuntó Gabriel Capellá, director del IDIBELL, en su intervención en el sLHam. Además, para crear referentes y ejemplos a seguir, entre los seminarios impartidos en el IDIBELL la mayoría de ponentes han sido mujeres.

Durante su charla en el sLHam, Meritxell hizo una cita de Mary Wollstoncraft muy acertada: «No queremos que las científicas tengan poder sobre los científicos, sino que queremos que tengan poder sobre sí mismas«.

Marisa reconoció que en algunos momentos de su carrera había oído el síndrome de la impostora, un síndrome que sufren muchas mujeres en el mundo de la ciencia y por el que creen falsamente que no merecen estar allí. Los estereotipos de género y la invisibilización de las mujeres a lo largo de la historia han creado inseguridades sin fundamento en muchas de ellas. IDIBELL quiere empoderar sus científicas con actos como el sLHam y trabajando día a día por una ciencia equitativa, igualitaria y justa.

 

Vida personal y carrera científica

 

Uno de los principales retos al que se enfrentan las mujeres para poder desarrollar su carrera de forma igualitaria a la de sus compañeros es la conciliación familiar, en especial cuando se decide ser madre.

«La vida de la científica es muy similar a la vida de cualquier otra mujer, la única diferencia es que nosotros no podemos parar mucho, ya que a veces puedes perder el tren«, confesaba Meritxell. Avelina recordaba que cuando sus hijos eran pequeños descubrió tener más manos de las que pensaba para poder hacerlo todo.

 

«La vida de la científica es muy similar a la vida de cualquier otra mujer, la única diferencia es que nosotros no podemos parar mucho, ya que a veces puedes perder el tren«, Meritxell Rovira.

 

Pero, tal y como indicaba Isabel, «la ciencia no debe hacernos renunciar a nada«. Aunque todavía hay que seguir trabajando, la investigación ha evolucionado, y ahora es más fácil que hace un tiempo combinar vida personal y carrera científica. Carmen Ardanuy, investigadora principal del IDIBELL, destacaba que en su grupo muchas mujeres han sido madres mientras hacían su tesis y eso no les ha supuesto un impedimento para seguir avanzando profesionalmente.

 

«En mi grupo hay muchas mujeres han sido madres mientras hacían su tesis y eso no les ha supuesto un impedimento para seguir avanzando profesionalmente», Carmen Ardanuy.

 

 

 

Los mensajes para llevarse a casa

 

Los tiempos han cambiado y siguen cambiando, así que debemos seguir empujando hasta conseguir la participación plena y equitativa de la mujer en la ciencia. El pasado 11 de febrero, las sLHameres terminaron sus intervenciones con mensajes de ánimos para las nuevas generaciones.

Mercè les daba tres consejos: «No os rindáis; buscad el equilibrio interior y exterior, entre lo que necesitáis y lo que se os pide; y recordad la clave del PPD, priorizar, posponer y delegar«.

 

«No os rindáis; buscad el equilibrio interior y exterior, entre lo que necesitáis y lo que se os pide; y recordad la clave del PPD, priorizar, posponer y delegar«, Mercè Martí.

 

 

Avelina también terminó su intervención con un mensaje positivo: «Adelante, luchad, que como mujeres, vosotros sois el futuro«.

 

El sLHam se organiza con la colaboración del ayuntamiento de L’Hospitalet, del Auditori Barradas, de la Escuela de Música y Centro de las Artes de L’Hospitalet y de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT). La iniciativa cuenta también con el apoyo de Aire Ancient Baths, BioNova Científica, Labclinics, Sarstedt, Tebubio y Ecobétulo, que dotan los premios para las participantes.

Puede ver el vídeo completo de este acto aquí:

 

El Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge (IDIBELL) es un centro de investigación en biomedicina creado en 2004. Está participado por el Hospital Universitario de Bellvitge y el Hospital de Viladecans del Instituto Catalán de la Salud, el Instituto Catalán de Oncología, la Universidad de Barcelona y el Ayuntamiento de L’Hospitalet de Llobregat.

El IDIBELL es miembro del Campus de Excelencia Internacional de la Universidad de Barcelona HUBc y forma parte de la institución CERCA de la Generalitat de Catalunya. En 2009 se convirtió en uno de los cinco primeros centros de investigación españoles acreditados como instituto de investigación sanitaria por el Instituto de Salud Carlos III. Además, forma parte del programa «HR Excellence in Research» de la Unión Europea y es miembro de EATRIS y REGIC. Desde el año 2018, IDIBELL es un Centro Acreditado de la Fundación Científica AECC (FCAECC).

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