Haemophilus parainfluenzae es una bacteria oportunista, es decir, que puede vivir en el huésped sin causar problemas, pero en momentos determinados, cuando por ejemplo el sistema inmunitario está debilitado, puede causar enfermedades graves que incluso pueden poner en riesgo la vida.
La resistencia a los antibióticos es un fenómeno natural en el que las bacterias se adaptan y evolucionan para hacerse resistentes al tratamiento con antibióticos. Sin embargo, el uso indebido de estos fármacos en personas y animales está acelerando el proceso convirtiéndolo en uno de los mayores problemas de salud pública a nivel mundial.
En el caso de H. parainfluenzae la adquisición de resistencias se puede dar por mutaciones puntales del genoma o por la adición de nuevos genes que le confieren resistencia. Este segundo mecanismo tiene lugar gracias a la existencia de pequeños fragmentos de ADN, llamados transposones, con la capacidad de moverse de manera autosuficiente, mecanismo habitual en muchas especies bacterianas.
El grupo de investigación en Epidemiología de las Infecciones Bacterianas del Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge (IDIBELL) y del Hospital Universitario de Bellvitge (HUB), liderados por la Dra. Sara Martí conjuntamente con la Dra. Carmen Ardanuy, han realizado un estudio genómico para caracterizar en detalle los mecanismos de adquisición de resistencia de H. parainfluenzae aislados del tracto urogenital y respiratorio. Este estudio ha formado parte de dos tesis doctorales que fueron defendidas en el campus de Bellvitge el pasado mes de julio por dos miembros del servicio de microbiología, Yanik Sierra y Aida González.
Los resultados, publicados en la revista Journal of Antimicrobial Chemotherapy, han identificado grandes fragmentos móviles de ADN que contienen hasta tres transposones que confieren resistencia a diferentes antibióticos. Esto, según la Dra. Martí indica que «los elementos transferibles podrían estar jugando un papel muy importante en la transmisión de resistencias«, y añade, «estos elementos podrían contribuir a la propagación de estas resistencias de unas bacterias a las otras«.
Estudios recientes del mismo grupo habían reportado que cepas de H. parainfluenzae aisladas del tracto urogenital, y resistentes a varios antibióticos, habían desarrollado cápsulas de polisacáridos, característica no descrita hasta el momento en esta especie bacteriana. «Estos envoltorios compuestos de azúcares se consideran un factor de virulencia, ya que protegen las bacterias del ataque del sistema inmunitario y otras agresiones«, indica la Dra. Ardanuy.
Los análisis genómicos realizadas en el estudio actual, sólo han encontrado los genes codificantes para la cápsula en aquellas cepas aisladas del tracto urogenital, el que, según las Dras. Martí y Ardanuy, podría indicar la capacidad del H. parainfluenzae a adaptarse a los diferentes ambientes.
El Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge (IDIBELL) es un centro de investigación en biomedicina creado en 2004. Está participado por el Hospital Universitario de Bellvitge y el Hospital de Viladecans del Instituto Catalán de la Salud, el Instituto Catalán de Oncología, la Universidad de Barcelona y el Ayuntamiento de L’Hospitalet de Llobregat.
El IDIBELL es miembro del Campus de Excelencia Internacional de la Universidad de Barcelona HUBc y forma parte de la institución CERCA de la Generalitat de Catalunya. En 2009 se convirtió en uno de los cinco primeros centros de investigación españoles acreditados como instituto de investigación sanitaria por el Instituto de Salud Carlos III. Además, forma parte del programa «HR Excellence in Research» de la Unión Europea y es miembro de EATRIS y REGIC. Desde el año 2018, IDIBELL es un Centro Acreditado de la Fundación Científica AECC (FCAECC).