Según la última actualización del ENCODE (la Enciclopedia de elementos del ADN) en el genoma humano existen cerca de 10.000 secuencias largas de ARN que no codifican por ninguna proteína. El laboratorio de Cedric Notredame en el Centro de Regulación Genómica (CRG) intenta detectar no sólo en humanos sino también en otras especies para comprender su funcionalidad.
Cedric Notredame explicó su investigación en una conferencia enmarcada dentro el ciclo de seminarios del IDIBELL el 19 de abril.
El laboratorio de bioinformática comparada del CRG, liderado por Notredame, está desarrollando métodos para combinar información evolutiva con datos experimentales para así detectar secuencias de ARN largo no codificante en el mayor número de especies como sea posible.
“Nuestro objetivo” ha explicado el investigador es entender bajo qué clase de presión evolutiva han evolucionado y evoluciona el ARN largo no codificante porque creemos que este podría ser un buen punto de partida para entender cuál es su función”.