Un nuevo trabajo conjunto del Hospital del Mar Research Institute, Vall d’Hebron Instituto de Oncología (VHIO), el IDIBELL y el Instituto Catalán de Oncología, con investigadores del CIBER del Cáncer (CIBERONC), abre la puerta una nueva vía para evitar la proliferación de los tumores. Se trata de combinar diferentes tratamientos existentes para atacar por tres bandas a las células cancerosas y detener su progresión. El estudio lo publica la revista EMBO Journal.
Los investigadores se han centrado en el papel de una proteína en concreto, IKKα, que sabe que actúa sobre otras proteínas para permitir a las células tumorales multiplicarse y escapar de la acción de los tratamientos. Atacar esta proteína no es actualmente viable, puesto que los inhibidores generales de IKKα pueden causar mucha toxicidad a los pacientes. Por tanto, los investigadores han buscado otras vías para actuar y han podido comprobar cómo IKKα regula dos vías relacionadas con la proliferación de los tumores y la resistencia a la quimioterapia.
“En los tumores, IKKα es capaz de regular, activar, diferentes vías vinculadas a la proliferación y supervivencia tumoral, en consecuencia, identificar estas vías es esencial para diseñar nuevas dianas terapéuticas para el tratamiento de los pacientes con cáncer”, explica el Dr. Lluís Espinosa, del Hospital del Mar Research Institute y coordinador del trabajo. Las vías identificadas en este trabajo implican a la proteína BRD4 y la vía de señalización JAK/STAT y existen fármacos que pueden inhibir su actividad. En la realización de este trabajo también han colaborado los equipos de investigación del Dr. Joan Seoane, del VHIO, y del Dr. Alberto Villanueva, del Instituto Catalán de Oncología y el IDIBELL, que han aportado su experiencia en la realización de diferentes aproximaciones experimentales.
Nuevas funciones de IKKα
Hasta ahora no se tenían pistas sobre la capacidad de IKKα de actuar sobre los tumores a través de ambas vías. Al activarlas, las células cancerosas son capaces de proliferar y, a su vez, se inhibe la muerte celular inducida por los tratamientos de quimioterapia. La inhibición de ambas vías potencia la muerte de las células tumorales en respuesta a la quimioterapia. Esto. Este papel se ha podido comprobar tanto en modelos animales como en organoides generados a partir de células de pacientes con cáncer de colon y recto, aunque las conclusiones pueden extenderse a otros tumores con estos mecanismos activados. Se ha podido certificar que «en los tumores que presentan una activación combinada de las dos vías por IKKα, inhibirlas de forma conjunta con quimioterapia es mucho más efectivo que los tratamientos individuales», añaden los investigadores.
Esto puede permitir seleccionar combinaciones de tratamientos que actúen juntamente con la quimioterapia para frenar el cáncer. A su vez, el hecho de utilizar más de un fármaco también facilita reducir las dosis y la toxicidad de los tratamientos. Por eso mismo, realizar cribados para identificar los tumores con estos mecanismos activados, podría permitir la identificación de los pacientes candidatos a nuevos abordajes terapéuticos. Los investigadores también han podido identificar como marcador de pronóstico a los pacientes con cáncer de colon y recto los niveles tanto de IKKα como de otra proteína, el factor inhibidor de la leucemia (LIF).