Los tumores de cabeza y cuello son el sexto tipo de cáncer más frecuente a nivel global y engloban tumores que afectan la cavidad oral y la faringe. Los factores de riesgo principales son el alcohol y el tabaco, aunque recientemente se ha detectado el virus del papiloma humano (VPH) como desencadenante del tumor en el caso del carcinoma de células escamosas de la faringe. La infección oral por este virus causa una proporción considerable de los casos de cáncer de faringe en Europa y Estados Unidos, un 80%, pero menos de un 10% en ciertas regiones del mundo, cifra que depende de los diferentes hábitos sexuales y del consumo de tabaco y alcohol de la población.
La incidencia del cáncer de faringe está incrementando año tras año y se estima que en 2030 llegue a 1 millón de nuevos casos anuales. Todavía hay muy pocos estudios epidemiológicos de calidad que evalúen correctamente la prevalencia oral del VPH y los factores asociados a la transmisión del virus, esenciales para elaborar medidas de prevención.
En este sentido, la revista eClinicalMedicine acaba de publicar los resultados del estudio PROGRESS, el primero en describir de forma robusta la prevalencia de la infección oral por VPH y los factores asociados en Europa y en Estados Unidos. Este estudio ha realizado pruebas de detección de VPH oral de alta sensibilidad y ha obtenido datos de salud y sociodemográficas de 7674 participantes de cinco países gracias a la colaboración internacional entre el grupo de investigación en infecciones y cáncer del IDIBELL y el Instituto Catalán de Oncología, centros de investigación y sanitarios de Estados Unidos, Alemania, Francia y el Reino Unido y la compañía farmacéutica Merck.
Los factores asociados: el sexo, la edad, el número de parejas sexuales y fumar
En total, la prevalencia de VPH oral ha sido de un 7,4% de las muestras analizadas, un 2% en el caso de las cepas de alto riesgo. En todos los países analizados, la prevalencia del VPH de alto riesgo es de 2 a 4 veces más alta en hombres que en mujeres. Estos resultados son consistentes con la mayor frecuencia de cáncer de orofaringe en hombres que en mujeres. Como factores asociados a la infección, aparte del sexo, se han identificado la edad, el consumo de marihuana, el número de parejas sexuales, la salud bucodental y haber tenido recientemente una infección de transmisión sexual.
A nivel de país, se han detectado más casos de VPH oral en Francia, donde también se reportan más prácticas bisexuales, fumadores y gingivitis, y en el Reino Unido, donde los participantes tienen un mayor número de parejas sexuales y casos de periodontitis. Otro factor asociado a la infección por VPH oral es fumar marihuana, seguramente porque esta sustancia deteriora el sistema inmunitario. Tal y como se había visto en estudios anteriores, el número de parejas sexuales femeninas con las que se ha realizado sexo oral también ha resultado ser un factor de riesgo para la transmisión del VPH de alto riesgo pero sólo en hombres, no en mujeres. Se espera que con los próximos estudios epidemiológicos se puedan explicar los motivos de estas diferencias.
La edad también es un factor clave en la infección por VPH: su frecuencia aumenta en grupos de edad más avanzados, en concreto a partir de los 40 años, “seguramente porque a medida que avanza el tiempo, aumenta la exposición al virus, la persistencia de la infección, se pueden reactivar infecciones latentes y/o también disminuye la actividad del sistema inmunitario“, explica la Dra Laia Alemany, co-coordinadora del programa de investigación en epidemiología del cáncer del IDIBELL y el ICO y primera autora del estudio.
La importancia de la prevención
Es la persistencia del virus del papiloma humano en el tejido epitelial de la faringe lo que puede acabar provocando la aparición de un tumor, al igual que ocurre en el cérvix, la vulva, el ano y el pene. La probabilidad de que esto ocurra es más alta en el caso de los VPH de alto riesgo en comparación a los de bajo riesgo. Por ello, la principal vía de prevención de este cáncer es la prevención primaria de la infección por VPH mediante la vacunación y la reducción del consumo de alcohol y tabaco.
“Del cáncer de orofaringe tenemos muy poca información en comparación al cáncer de cérvix, y ahora mismo no hay ningún cribado rutinario“, señala la Dra Alemany, e insiste en que “por eso hay que preparar programas y políticas que ayuden a prevenir esta infección a largo plazo”. El estudio PROGRESS ha representado un paso importante en este sentido, y el propio equipo está actualmente trabajando en un proyecto más amplio para seguir describiendo la epidemiología del virus, el cual nos acercará a la prevención y erradicación de la infección por VPH.
El Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge (IDIBELL) es un centro de investigación en biomedicina creado en 2004. Está participado por el Hospital Universitario de Bellvitge y el Hospital de Viladecans del Instituto Catalán de la Salud, el Instituto Catalán de Oncología, la Universidad de Barcelona y el Ayuntamiento de L’Hospitalet de Llobregat.
El IDIBELL es miembro del Campus de Excelencia Internacional de la Universidad de Barcelona HUBc y forma parte de la institución CERCA de la Generalitat de Catalunya. En 2009 se convirtió en uno de los cinco primeros centros de investigación españoles acreditados como instituto de investigación sanitaria por el Instituto de Salud Carlos III. Además, forma parte del programa “HR Excellence in Research” de la Unión Europea y es miembro de EATRIS y REGIC. Desde el año 2018, IDIBELL es un Centro Acreditado de la Fundación Científica AECC (FCAECC).
El Instituto Catalán de Oncología es una empresa pública creada en 1995 por el Departamento de Salud que empezó a funcionar en las instalaciones del Hospital Duran i Reynals de L’Hospitalet de Llobregat. En 2002 se inauguró el ICO Girona, en el Hospital Doctor Josep Trueta, y al año siguiente el ICO Badalona, en el Hospital Universitario Germans Trias i Pujol. En 2014 se puso en marcha el ICO Camp de Tarragona y Terres de l’Ebre en el Hospital Joan XXIII de Tarragona y en el Virgen de la Cinta de Tortosa.
Además, trabaja conjuntamente con una veintena de otros hospitales. El objetivo de este trabajo en red es llevar al especialista allá donde se encuentra el paciente y garantizar la equidad en la prestación sanitaria.