La Psicoterapia Positiva en Cáncer, diseñada por un equipo del IDIBELL i del ICO, promueve el crecimiento personal durante la enfermedad para potenciar cambios vitales positivos, con los cuáles reducir a largo plazo el malestar emocional, cómo la ansiedad y depresión, y los síntomas de estrés. El malestar emocional que presentan muchas personas con cáncer al acabar sus tratamientos oncológicos no tiene tanto que ver con afrontar una amenaza presente, cómo puede ser el propio tratamiento, sino con una amenaza futura, como recuperar una vida plena o el miedo a que vuelva la enfermedad.
¿Qué es la psicoterapia positiva?
La Psicoterapia Positiva facilita acomodar y cambiar la propia vida de forma profunda y consciente a la amenaza que supone el cáncer, priorizando especialmente una mayor sintonía con las relaciones personales significativas. Este foco terapéutico produce cambios vitales positivos más duraderos que inciden en descensos mantenidos del malestar emocional.
Afrontar el diagnóstico y tratamiento de un cáncer genera, en un 40% de los pacientes, un malestar emocional significativo que impide llevar una vida normal. Es habitual sentir decaimiento, irritabilidad, experimentar miedo, dificultades para dormir, problemas en las relaciones sociales o íntimas e incertidumbre hacia el futuro. La elevada amenaza de la enfermedad y los posibles cambios físicos, laborales y familiares que puede conllevar generan muchas reacciones emocionales. Hasta el momento los tratamientos psico-oncológicos se habían centrado en enseñar a los pacientes a controlar o manejar estas reacciones, es decir, aprender a paliarlas. Sin embargo, tras el cáncer los pacientes no sólo experimentan malestar emocional, muchos refieren que la enfermedad ha sido una oportunidad para replantearse profundamente la vida “en positivo”.
Un estudio comparativo entre psicoterapia Positiva y terapia cognitivo-conductual
Se realizó un ensayo clínico aleatorizado para comparar la Psicoterapia Positiva en Cáncer y la Terapia Cognitivo-conductual, tratamiento estándar para el manejo de las reacciones de estrés. En el estudio participaron 140 mujeres que después de finalizar sus tratamientos oncológicos para el cáncer de mama presentaban un elevado malestar emocional. De éstas, 67 recibieron Psicoterapia Positiva y 73 Terapia Cognivito-conductual.
Los resultados, publicados en la revista The Journal of Positive Psychology, mostraron que la Psicoterapia Positiva en Cáncer reducía más a largo plazo el malestar emocional y el estrés que una terapia centrada en controlar las reacciones de estrés.