El Parlamento ha entregado hoy en el marco de la celebración de la Diada de Cataluña, la medalla de honor en la categoría de oro a Manel Esteller, «por su trayectoria como médico e investigador catalán de referencia internacional». En el transcurso del acto, la presidenta Carmen Forcadell, y el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, han destacado la importancia de la investigación en Cataluña y su contribución en la lucha contra el cáncer. Esteller ha hecho un llamamiento a garantizar el talento y la formación de las generaciones futuras.
La mesa de la cámara acordó en julio por unanimidad el otorgamiento de la distinción, con la que reconoce «la labor de investigación y los logros alcanzados» por Esteller «en su lucha contra el cáncer humano» y «su contribución a la proyección de una Cataluña líder en la investigación científica «, además de poner de manifiesto» la aportación al progreso colectivo que ha significado la aplicación de sus investigaciones en ámbitos tan diversos como las ciencias humanas y sociales, las ciencias de la vida y de la salud, la ingeniería, la tecnología y las ciencias experimentales «.
Al inicio del acto, Jesús Ureña, profesor agregado de la Facultad de Biología de la Universidad de Barcelona, ​​ha hecho la glosa del galardonado.
A continuación, la presidenta ha entregado la medalla a Esteller, quien a continuación ha pronunciado unas palabras con las que ha agradecido la distinción y ha destacado la importancia de la investigación, y de la formación de las futuras generaciones, porque aunque «hay problemas muy graves de salud» tenemos que seguir investigando. «Yo seguiré investigando, es lo que sé hacer y es lo que me gusta», dijo, pero «el sueño» de una «salud mejor para todos» a veces «dependerá de otra gente que vendrá después». «Por favor, pongamos hoy las bases de una sociedad basada en la educación y el conocimiento», concluyó.
La presidenta ha agradecido a Esteller su compromiso para «intentar hacer, desde Cataluña, que el mundo sea un poco mejor». Forcadell ha destacado que «la lucha contra el cáncer» es «de toda la humanidad» y añadió que «es un orgullo que desde nuestro país se contribuya a esta tarea universal». Ha afirmado que «desde las instituciones hay que poner todos los recursos» posibles para potenciar aún más la investigación y la investigación, ámbitos propios «de una sociedad que no se resigna». «Y este país, lo demuestra la historia, no se resigna, nunca desfallece», concluyó.
Puigdemont ha destacado que la medalla «honra al destinatario», pero también «nos honra a todo el país». «Cuando nos preguntamos qué clase de gente somos los catalanes, como queremos que se nos conozca en el mundo, nos gusta que se nos reconozca como un pueblo que es capaz de hacer aportaciones relevantes para el cambio y el progreso de la humanidad», afirmó el presidente. «No es casual que en Cataluña se esté trabajando de forma pionera en la investigación en ámbitos como el sida o el cáncer», sino que tiene que ver, dijo, «con un compromiso de país de la gente que huye de toda resignación, que no se conforma «.
El acto ha terminado con las interpretaciones de ‘La sardana de abril’, compuesta por Lluís M. Millet a partir de un poema de Joan Llongueras; ‘El amor marinero’, compuesta por Manuel Oltra a partir de un poema de Pere Quart, y, por último, ‘Els Segadors’, el himno nacional de Cataluña, con el auditorio en pie.
Este año, la encargada de las interpretaciones musicales ha sido la Coral Sant Jordi, bajo la dirección de Oriol Castanyer, coincidiendo con el vigésimo aniversario de la muerte de su fundador, Oriol Martorell, que fue diputado en la IV legislatura, y con el cuadragésimo aniversario de la Diada de Sant Boi de 1976, donde los asistentes cantaron ‘Els Segadors’ dirigidos y alentados por Martorell y la coral.