“Boadicea era el nombre de un guerrero británico que luchó contra la invasión romana. Ahora es también el nombre de un nuevo instrumento para luchar contra el nuevo enemigo: el cáncer”. El investigador de la Universidad de Cambridge Antonis Antoniou ha explicado en el seminario IDIBELL del 30 de septiembre sus últimos avances en el desarrollo de
modelos genéticos como Boadicea para predecir la susceptibilidad hereditaria del cáncer de mama.
El trabajo analítico del equipo de Antonis Antoniou es aplicar técnicas matemáticas y computacionales a partir de la información genética que les llega de casos familiares de mutaciones en los genes BRCA1 i BRCA2, asociados al riesgo de cáncer de mama, para observar qué modelos genéticos encajan mejor con los datos y se pueden convertir en programas útiles de predicción de riesgo de cáncer de mama, ovarios o próstata entre otros.
De este trabajo ha nacido el modelo Boadicea que ya utilizan más de 1.500 usuarios en todo el mundo. “Las aplicaciones clínicas del programa son,
por un lado ayudar a decidir la idoneidad o no de un test genético a una mujer según la probabilidad que tiene de ser portadora de mutaciones en los genes BRCA1 o BRCa2, y el otro para identificar mujeres con alto riesgo de sufrir cáncer de mama, porque aunque no presentan las mutaciones en estos genes, tienen antecedentes familiares, y hacerles un seguimiento clínico. También se usa por seleccionar familias de alto riesgo por ensayos clínicos”.
El modelo Boadicea está en constante evolución ya que se han descubierto hasta una treintena de variantes genéticas que, aunque con mucha menos penetrancia que BRCA1 y BCRA2, son modificadoras del riesgo de sufrir cáncer de mama. “El reto” explica Antoniou “es encontrar el modo de combinar toda esta nueva información en un modelo matemático para poder realizar predicciones de riesgo más precisas.
03/10/2011